Reseña

Reseña

MARCA DE RECUERDOS OSCUROS.
Querido lector; podrán olvidar dicho suceso del cual fuimos protagonistas y testigos oculares, pero lo más cruel es que llevaremos consigo la marca del recuerdo de la guerra tan inhumana que vivió nuestro pulgarcito de américa.
Pero, la verdadera razón del inicio de dicha historia nadie lo sabe, pues según, que los dos bandos querían el poder y así muchas versiones de lo que fue la guerra en El Salvador.
Como lectores no podríamos dar la razón a ningún grupo, puesto que somos seres humanos, cometemos errores aun los que creemos que se consideraban aparentemente buenas personas e inteligentes, pudieron cometer hechos inhumanos, o estar equivocados al elegir una opción; en las circunstancias en las que nuestro pueblo vivía. Como todo un hecho histórico y acontecimiento social, en este caso, tuvo su inicio; también tiene un final, un desenlace, una conclusión y una moraleja; seguir aprendiendo de lo que cometemos en la vida, de tomar lo bueno y poder rechazar lo malo, lo que no tiene un buen ejemplo a la vida, lo que corrompe, lo que te perturba, para poder actuar con principios y valores y, ser una mejor persona, un buen ciudadano, que busca lo bueno ante la sociedad, ante la humanidad, ante todo cuanto te rodea en éste mundo.
Pero en realidad, ¿Cuál fue el motivo?, ni tú, ni yo podríamos encontrar una verdadera conclusión ante tal situación, Dios que todo lo ve y es justo en todo, solo él sabrá la verdadera razón y los motivos por el cual los gobernantes en ese momento decidieron expandir dicha tragedia; en la historia de nuestro querido país El Salvador.
Con este libro, te quiero dar a conocer mi experiencia vivida como Sub-sargento: de indicativo “el pollo” del Batallón de Infantería de Reacción Inmediata “General Ramón Belloso” de la Fuerza Armada de El Salvador, una verdadera y gran historia a nivel nacional e internacional.
Tal vez conoces la historia de la guerra de El Salvador en general, pueda que también conozcas las pérdidas económicas y humanas que se dieron, pueda ser que también conozcas como se llegó a firmar los acuerdos de paz. Ahora veamos hoy en día, en esta época, los jóvenes que no fueron testigos oculares de este acontecimiento, ¿qué opinan de la historia de la guerra de El Salvador?; para todos sea solo eso “una historia”, porque te la contaron o porque la leíste y te pareció aburrida. Tú lo leíste, pero no lo viviste, te has preguntado ¿Qué fue lo que realmente vivió nuestra gente en ese lugar, en ese preciso momento?
En ese campo de batalla nuestro pueblo peleaba contra su misma gente, como una familia que se desintegra y se vuelve en contra, eso fue lo que vivió nuestro país.
Los que aun sobrevivimos en dicha historia, no dejamos de recordar, cuanta tristeza, cuanto miedo y aflicción etc. como también de llegar a apreciar a su compañero como a un hermano. Recuerda que los que estábamos en ese campo de batalla, éramos seres humanos, que por lo consiguiente teníamos un corazón, que más de alguna vez se nos partió al saber que teníamos que dejar a un hermano, a su compatriota, a nuestros jefes en general.
Yo siendo un adolecente no solo fui protagonista, sino perdí todo cuanto tenía; mi infancia, mi juventud, también mis sentimientos jugaron un papel importante dentro de ello; no saben Cuánto lloré, Cuánto espere para que eso terminara, Cuánto rogué a Dios porque eso pasara pronto y no volver a vivir otra tribulación como lo fue la guerra, un sentimiento profundo que se esconde dentro de dicho acontecimiento, el cual tal vez tú lo has ignorado, te has preguntado ¿cuánto sufrió nuestra gente? ver aquellos terribles masacres en su familia.
Entramos en lo sentimental, la primera injusticia cometida en El Salvador está: en que el pueblo Salvadoreño luchaba contra sí mismo, en lugar de unirse como hermanos; las personas que fueron protagonistas de esta guerra, tanto militares como guerrilleros, eran seres humanos, de un mismo país como tú y como yo.
Que a cada uno de ellos si se les preguntara tienen una historia que aportar de sus experiencias, de sus momentos vividos en dicha historia, quizás también les dieran las mismas características antes mencionadas, recuerda que los que estábamos en ese campo de batalla éramos de carne y hueso, no éramos de acero, como nos hacían creer los oficiales en los entrenamientos, por lo consiguiente corría sangre por nuestras venas, que más tarde o temprano, más de alguna vez, murieron compañeros de hemorragias severas, por falta de atención médica, mientras que nosotros nos llenamos de coraje y tristeza e impotencia, sabiendo que teníamos que dejar a un hermano, a nuestro compatriota, que dentro de estos habían oficiales sinceros que peleaban y brindaban su vida por el deber…………………