Cadáveres en el armario
El autor no tiene escapatoria porque habita el pellejo de sus personajes y es protagonista, pero la ficción lo salva de convertir esos roles en “lugares comunes”. La ficción ayuda a ver sin antiojeras la realidad que a veces no se la sabe ver porque la cotidianeidad la tapa como hierba que oculta el rosal o la basura la vida o la muerte.