Reseña

Estos tres cuentecillos corresponden a historias de un cercano país que flota en el mundo sin poder aterrizar en su propia realidad como tal.

Tratan de revelar esa realidad y la de los habitantes que en él viven. En un buen sentido, representan su historia misma, que se repite en un ciclo interminable en el tiempo, como haciendo cierto aquél eterno retorno del que hablaban los estoicos aquellos de la Grecia lejana

Las Cacarañícaras y los Poligulígulas hablan de una realidad política, que parece envolver eternamente la cotidianidad de sus habitantes. El Pequeño Promontorio relata esa interminable tendencia de sus ciudadanos a extrañarse del mismo utilizando tácticas sólo posibles en sus muy particulares mentes. Y La Comedia Nacional describe su extraño origen en el mundo, una especie de Popohl Vuh propio en el que se revela su propia naturaleza y su forma de ser.