¿Creciste? y ahora, ¿Quién te lee un cuento?
explorando los hilos de la mente a través de la historia
Si la vida fuese tan fácil probablemente se trataría de un cuento escrito a mano alzada por cada uno de nosotros con el proceso y el final que más nos considerase conveniente, pero a pesar de tener muchas diferencias entre si todos tendrán sin duda la misma intención en su final: Salvaguardar nuestra salud mental o en palabras más claras “buscar la felicidad”. Comúnmente me pregunto ¿Qué es la felicidad? Pues, más allá de teorizar de manera filosófica sobre este constructo ideológico podemos inferir es que es un estado subjetivo de bienestar o plenitud donde no existen emociones o sentimientos negativos o, aunque los hubiese, no son lo suficientemente fuertes para hacernos
sentir mal durante dicho estado. Naturalmente, al ser un estado comprendemos que no es perpetuo como tal o sostenible en la misma intensidad a lo largo del tiempo, entonces, ¿Qué podemos rescatar de este concepto de felicidad? Podría decirte que el camino para la felicidad más allá de su concepto abstracto, poético y filosófico es como tal la plenitud, pero podrás preguntarte ¿Qué tienen en común ambas? Al ser la plenitud también un estado. Aunque podamos asociarlas, no son lo mismo, ya que la plenitud es el estado de sentirse completo, en armonía interna y va más allá de la sensación temporal de emociones positivas como la felicidad, va enrutada a la búsqueda de aceptación personal, autorrealización, equilibrio y paz interior. Es por ello que te presento la siguiente obra, es el resultado de una breve recopilación de cuentos de autoría propia que, aunque pareciese poético fueron manifestados en un inicio en sueños y dándose forma a través de mi formación académica y breve experiencia dentro de la disciplina psicológica.
Como bien sabemos, el uso de cuentos, metáforas, refranes y paráfrasis es bastante usado dentro de la psicología, siendo una herramienta poderosa para explicar conceptos de manera psicoterapéutica y transmitir enseñanzas buscando el uso de analogías y metáforas que permiten comprender de una manera más accesible para ayudar al proceso de reflexión sobre experiencias propias a través de simbolismos. Es por ello que, de cada cuento, te brindo una explicación sobre los principales conceptos que psicológicamente cada uno intenta simbolizar o conceptualizar, pero por supuesto, tu interpretación es bastante importante y depende de cada lector sacar lo mejor de ello para poder darle el significado que más pudiese servirle. El uso de cuentos y metáforas no es nuevo dentro la psicología, porque esta
disciplina esta intrínsecamente alineada con la literatura, resulta difícil creer o que llegase a pasar que un profesional de la salud mental nunca en su vida haya siquiera tenido un acercamiento a las letras, desde lo más básico como “El Principito” de Antoine de Saint-Exupéry, pasando por la complejidad de los conceptos de las escuelas psicológicas clásicas como Sigmund Freud, Jacques Lacan, Carl Jung, Alfred Adler, Albert Bandura, Skinner, etc; exponentes modernos de la psicología como Walter Riso, Jorge Bucay, Gabriel Rolón hasta por supuesto eurociencias y filosofía griega como el estoicismo siendo la base de la psicología actual. Por tanto, quisiera mencionar que la presente obra o libro, como te sientas más cómodo llamándolo; está hecho con la intención de poder darte una cercanía a distintos conceptos dentro de la psicología que desde mi visión considero que son algunos de los principales que debemos reforzar de manera cotidiana para entrenar nuestra plenitud y nuestras habilidades como la resiliencia para empezar a sentirnos mejor con nosotros mismos. Por supuesto, esto no reemplaza un proceso psicoterapéutico como tal con un profesional en salud mental, ni tiene la intención de hacerlo. Sin embargo, si nunca has experimentado un proceso psicoterapéutico o estas pensado hacerlo, espero pueda servirte de ayuda o disipar algunas dudas en cuanto algunos procesos y
conceptos para que puedas dar el primer paso en la búsqueda de la plenitud y el amor propio. Espero sea de tu agrado, fue hecho con mucho cariño y pensado desde la perspectiva de todos los procesos que de manera cotidiana tenemos que afrontar, para no sentirse solo o sola, para comprender que es normal sentirte mal y no culparse, pero que siempre hay una salida y no hay más muestra de amor propio y
hacia los demás que trabajar en nuestras emociones sanando para encaminarnos a
ese estado subjetivo que es la felicidad por medio de la plenitud.