Grajú
el cielo quisquilloso
Imagina un niño desamparado clamando por comida y por amor.
Imagina que tú eres la persona buena que lo ayuda, y darte cuenta de que tus esfuerzos son pequeños ante la inmensidad de un problema.
Descubre en este fantástico cuento las sorpresas y los sueños de un niño que te harán meditar sobre la vida. La vida es un drama, o mejor dicho un crucigrama que en algunos casos se necesita ayuda. Y si te das por
vencido estás derrotado. Y aunque tenga gran voluntad, esta no es garantía de la victoria. Es posible que el hambre haga fallecer el cuerpo, pero el odio transforma a cualquier angelito en un demonio.
El hambre y la venganza se parecen y si ambas se juntan son una bomba nuclear.