El mundo que veo
Eris, la diosa de la discordia y, por ende, de la confusión, impera en nuestros días. La máxima latina divide et impera («divide y domina»), utilizada por los emperadores Julio César y Napoleón Bonaparte, es la médula del mundo globalizado. A través de la «Inteligencia artificial», reino de la confusión, nos han hecho creer que el porvenir, falto de ética como el doctor Frankenstein, personaje de la novelista inglesa Mary Shelley, pinta un luminoso porvenir. ¿Existen, en el siglo XXI, el capitalismo y el comunismo? Los filósofos Adam Smith
y Karl Marx, sus principales teóricos, dirían que no puesto que ambos ofrecieron una ética de la cual carece todo gobierno vendido al «poderoso caballero/es don dinero». No podemos hablar de inmoralidad sino de amoralidad.