Destellos del alba
antología poética
Los poetas incluidos en esta antología tienen diferente formación académica. En nuestro país muchos escritores han estudiado carreras distanciadas de la literatura. El estudio universitario de la literatura nos enseña gramática, lingüística, estética, pero no nos gradúa de escritores, la escritura va por un camino que cada uno edifica. Vallejo y Cortázar fueron profesores, pero la vida los llevó por la ruta de la creación. Y aquí tenemos su maravillosa obra. Los poetas antologados son disímiles, uno del otro. Y que bien. Pero sí hay una constante que los une con una cuerda invisible, es la poesía amorosa. Por momentos leo reflexiones filosóficas, pero a la página siguiente volvemos al amor gozoso o desencantado; encontramos poemas esperanzadores y por allí
hasta poemas para la infancia; por momentos el poeta escribe versos que parecen la letra de un bolero, pero a la vuelta de la página resuena un grito existencial; por momentos versos de pocas líneas que como ríos quieren decir un océano; por momentos la musicalidad de un poema sobre la Natividad, pero a la vuelta una oda a San Romero con versos como truenos; por momentos versos largos como Walt Withman aclamando libertad, pero en seguida tiernos poemas a la madre, o bien a nuestro prócer Anastasio Aquino. Más allá de formas y estilos, cada poeta tiene su lámpara poética encendida. Cabe aquí la mención de la lectura, pues mientras más leemos, nuestro universo lingüístico
se enriquecerá.