El principe oscuro I
el guerrero de Vladivostok
Richard huía a través de Ardross y su hermano gemelo iba tras
de él. Venimos a este mundo con los ojos cerrados, y la mayoría de
todos deciden vivir de la misma manera. Todo lo que empieza
tiene un final. Toda llama, por brillante que sea acaba en nada y
apagándose, pero entonces la llama resurge de entre las cenizas y
brillará de nuevo. Las historias más antiguas están escritas en el cosmos, es una lectura complicada. Puede que lo hayas visto, en un sueño quizás. Una tierra sombría y olvidada. Un lugar donde las almas pueden doblegar nuestras afligidas mentes. Lo perderemos todo. En cuanto recibas la marca de tu Raza Sayil y el Símbolo de la Maldición, un augurio de la Negra Oscuridad tendrás en tu Sangre Maldita. Mi pasado, mi presente y mi futuro, mi propia luz. Nada tendrá sentido y ni siquiera me importará. Para entonces ya no seré nunca más un ser humano, seré algo que alimente al mal, seré un Sayil más, un “L.”. Ve más allá de la muerte... ¡Sin sacrificio no puede haber victoria!