Reseña

Esta obra estaba destinada originalmente a un colectivo de autores referente a variaciones historiográficas sobre un mismo tema portuario, centrado en el puerto de Acajutla, sin embargo, no obstante la
espera de mejores tiempos para el proyecto inicial, he considerado que la historia colonial del puerto merece darla a conocer en esta publicación por el interesante pasado de Acajutla, historia que deberá ser completada por la del extraordinario siglo XIX, con sus muelles de hierro, vapores y ferrocarriles. Los temas presentados aquí provienen de muchas tempo-
radas de investigación realizadas en años anteriores con diversos objetivos, pero generalmente centradas en el occidente salvadoreño, con el pivote central de los tiempos coloniales, el cacao izalqueño y La Tri-
nidad de Sonsonate. Además, en esas investigaciones en archivos y bibliotecas estuvieron siempre presentes todo un cúmulo de intereses históricos que han poblado mi vida, como San Salvador en Ciudad Vieja,
mi gran aporte al patrimonio cultural salvadoreño, y las contribuciones al conocimiento de la historia náutica y portuaria en el país y en el horizonte olvidado de la piratería en nuestro Mar del Sur.
Prólogo En este “Acajutla, puerto colonial” están papeles trabajados en el Archivo General de Indias, en Sevilla; en la Biblioteca Nacional de París; en la Biblioteca Nacional del Congreso, en Washington D.C.; en el Archivo General de la Nación, en Ciudad de México, en la Real Academia de la Historia, en Madrid, en la Academia de Geografía e Historia de Guatemala;
en el Archivo General de Centroamérica, en Ciudad de Guatemala; y en varios otros repositorios de documentos y libros, tal la biblioteca del Banco Central de Nicaragua, en Managua. Y en especial está el apor-
te invaluable del gran amigo y colega Manuel Rubio Sánchez, por lo cual el espíritu tan productivo y trascendente del investigador guatemalteco se impone en este trabajo, lo cual me honra sobremanera. Sin la presencia de Manuel Rubio en los añorados días que compartimos tantas cosas buena, y ya desde hace muchos años solamente su definitivo recuerdo, jamás habría podido escribir este afán marítimo y portuario.
Varios temas de esta publicación ya fueron expuestos en obras anteriores, como lo relacionado con los Izalcos y La Trinidad de Sonsonate, la armada de Pedro de Alvarado y el paso de los corsarios ingleses, los cuales se incluyeron en el “Códice Sonsonate”

(1993) y en las “Crónicas de Cuzcatlán –Nequepio y del Mar del Sur” (2011 y 2014). Sin embargo, como vino nuevo en odres viejos, aquí se incorporan con variantes en un compromiso de intención monográfica dedicado al puerto de Acajutla.